viernes, 10 de septiembre de 2010

Cien


Cien. Un número redondo. Es más, un número con dos cifras redondas: el que ha alcanzado el ‘contador’ de entradas de este blog desde que echó andar como regalo de Reyes hace ya más de un año y medio. Justo ese día en que se hizo realidad otro regalo igualmente pedido a los tres Magos: dejar de fumar.
Y en eso sigo, tantos días después, con un ritmo no demasiado angustioso de publicación en esta bitácora (desde luego, lejos de la estajanovista capacidad de algunos admirados autores cibernéticos) y, lo que me enorgullece más, con una absoluta abstinencia en el consumo de tabaco.
Un centenar de entradas después de aquel tímido arranque, he encontrado en el ordenador una imagen archivada hace ya tiempo y que viene al pelo tal día como hoy: es la portada de The New York Times del 12 de septiembre de 2001, el día siguiente al ataque terrorista a las Torres Gemelas. Mañana se cumplen nueve años de esa tragedia; nueve años en los que me temo que no hemos aprendido demasiadas cosas. Los noticieros están llenos de ejemplos de intolerancia, de desprecio, de odio al diferente… Entre individuos, entre países o, lo que me parece aún peor y enormemente más peligroso, entre estados soberanos y colectivos étnicos, grupos sociales o sensibilidades religiosas. Una y otra vez, gracias a mesías y profetas, en la misma piedra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario